El año pasado y por la pandemia de Covid-19, el censo de personas que viven en la calle se tuvo que suspender, por lo que al día de hoy los últimos datos estadísticos y oficiales son de 2019 en la Capital Federal.
En abril de ese año, y según cifras oficiales, eran 1.147 las personas que se encontraban viviendo en la calle en la Ciudad de Buenos Aires, de las cuales, entre 50 y 60 eran niñas, niños y adolescentes.
M., la nena de siete años que estuvo siendo buscada durante tres días en la Capital Federal y luego en el Conurbano bonaerense, y su familia, formarían parte de esas cifras que difieren a las que surgen del Censo Popular de Personas en Situación de Calle que fue realizado por diferentes organizaciones sociales.
En ese censo se determinó que en abril de 2019, eran 7.251 las personas que se encontraban en esa situación, y 871 los niños, niñas y adolescente.
En ese censo además se indicó que 40 mujeres embarazadas se encontraban en la misma situación.
Voceros del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat porteño dijeron a NA que la cifra que manejan las organizaciones sociales es diferente a la oficial debido a la «metodología que aplicaron».
«La gran diferencia con el número de las ONG radica en la metodología que aplicaron las organizaciones. Ellos tomaron como gente en la calle a toda persona que estaba en situación de riesgo habitacional. Por ejemplo: gente que estaba en Paradores o Centros de Inclusión Social, gente que estaba con subsidio habitacional en hoteles, personas que viven en casas tomadas en riesgo de ser desalojadas, etcétera. Y nosotros medimos la gente que efectivamente estaba en situación de calle el día del Censo», explicó una fuente de la cartera de Desarrollo Humano y Hábitat.
Según remarcó la fuente consultada, el Gobierno porteño sacó la foto de la gente que efectivamente estaba en calle al momento de censar y las organizaciones sociales contabilizaron a toda persona que estaba en situación de riesgo habitacional.
Para el próximo mes de abril, está previsto que se realice un nuevo censo y que fue acordado entre el Gobierno de la Ciudad con todas las organizaciones sociales que trabajan con esta problemática.
El acuerdo que establece la creación de una mesa de trabajo integrada por todos los actores que abordan la temática en la Ciudad, y que por primera vez trabajarán juntos para definir la metodología del censo anual dispuesto por la Ley 3.706 de Protección y Garantía Integral de los Derechos de las Personas en Situación de Calle y en Riesgo a la Situación de Calle, se concretó en diciembre pasado.
Además, este acuerdo propone la conformación de mesas de trabajo para el diseño de políticas públicas que aborden distintos aspectos de la problemática.
«Vivimos en un país donde no existen estadísticas serias sobre la situación de las infancias, y sin ellas es imposible generar políticas públicas que impacten en esta población», subrayó Alejandra Perinetti, directora nacional de Aldeas Infantiles SOS Argentina, al referirse al caso de M. y de las niñas y niños que viven que viven en la calle.
Además, Perinetti remarcó a NA, que «Argentina es un país que ha sido observado en reiteradas oportunidades por el Comité del Niño/a de Naciones Unidas por no contar con estadísticas que permitan visibilizar las diversas problemáticas que atraviesan los más chicos».
Desde la Asamblea Popular PSC, un colectivo de organizaciones sociales, políticas y comunitarias que luchan por los derechos de las personas en situación de calle y en riesgo de estarlo, se manifestaron no bien se conoció la denuncia por la desaparición de M., y que se supo que vivía en la calle junto a su madre y hermanos.
«Las organizaciones vamos a insistir en dar la pelea para que la situación de calle sea prioritaria en las políticas públicas, para combatir la violencia institucional y para disputar sentido ante la sociedad, derribando los estereotipos y prejuicios y construyendo redes comunitarias potentes», publicó la Asamblea en sus redes sociales.
Y agregaron: «La situación de calle se supera en red de acompañamiento y contención integral, con el fortalecimiento de los ingresos y recursos personales y familiares, con acceso a la vivienda social, comunitaria, digna, con el reconocimiento de que es necesario atender sus causas y consecuencias interdisciplinariamente, con perspectiva de género, y advirtiendo las particularidades de las maternidades y las crianzas en situación de calle y las múltiples violencias que se sufren».
El Gobierno porteño informó que entre 2019 y 2021 visitaron el lugar donde dormían M. y su familia en más de 20 ocasiones; y que en tres oportunidades el equipo de Buenos Aires Presente (BAP) pudo charlar con la madre de la menor, pero que «ella siempre declinó los ofrecimientos de llevarla a un CIS o de ayudarla a tramitar un subsidio habitacional».
Además, aseguraron que «debido a la situación de consumo que atravesaba» la madre de M., le ofrecieron «en distintas oportunidades contención y acompañamiento médico», pero la mujer «los rechazó», por lo que ahora se le volvió a ofrecer a Stela, una evaluación integral de la situación de consumo y el acompañamiento para iniciar un tratamiento.