El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, resaltó hoy la importancia de «disminuir los viajes internacionales» para prevenir el ingreso al país de la variante Delta de coronavirus, cuyo control epidemiológico «se hace muy difícil» si alcanza una «circulación comunitaria».
«Tenemos que hacer los mayores esfuerzos para disminuir los viajes internacionales», sostuvo Quirós, en una conferencia de prensa en la Jefatura de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, en el barrio de Parque Patricios.
«Cada persona que viene -a la Argentina- potencialmente puede traer esta variante y esta variante cuando llega a la circulación comunitaria se hace muy difícil el control epidemiológico», agregó el funcionario.
Quirós se expresó de esta manera al ser consultado por la medida del Gobierno nacional que establece un cupo de ingreso al país de 600 personas por día, en el marco de la segunda ola de la pandemia de Covid-19 por la que transita el país.
Asimismo, pidió a las personas que «no tengan una necesidad imperiosa, indispensable de viajar» al extranjero, que posterguen esos planes.
Solicitó un «mayor esfuerzo» en tal sentido durante el próximo «mes, mes y medio», mientras se completa «la parte más intensiva de la campaña de vacunación».
Resaltó Quirós la importancia de «ser lo más prudentes y evitar en la medida que se pueda la mayor cantidad de interacciones con el mundo exterior».
Con respecto a la vacunación, dijo que «la experiencia con la variante Delta es que efectivamente una sola dosis es poco robusta para evitar el contagio», dado que «apenas» lo previene en un 30 o 35 por ciento de los casos.
Sí destacó que una sola aplicación de una vacuna «es mucho más robusta para evitar la enfermedad grave y mortal».
Por este motivo, el Gobierno porteño dispuso avanzar con el plan para inocular a la población acortando «lo más que se pueda» el intervalo entre la primera y la segunda dosis del fármaco contra el coronavirus.
Comentó al respecto que esperan disponer de ampollas de la segunda dosis de la vacuna rusa Sputnik V en los próximos días, para aplicarlas en «todas las personas que hayan cumplido el período de tres meses» de intervalo con relación al primer suministro.
«El gran problema con esta cepa -Delta- es que es muy contagiosa y se transmite con más facilidad», insistió Quirós.
También dijo que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires está a la espera de que las autoridades chinas procesen todos los pedidos de vacunas CanSino para avanzar con las gestiones de compra de esos fármacos.
Finalmente, indicó que las personas -con residencia en la Capital Federal- que regresen al país procedentes de viajes al exterior y den positivo en controles de coronavirus deberán permanecer aisladas una semana como mínimo en un hotel afrontando los costos por el alojamiento.
Lo propio ocurrirá con aquellos viajeros que tengan dificultades para aislarse en sus domicilios, incluso a pesar de haber dado negativo en Covid-19 al retornar a la Argentina.
«Los costos estarán a cargo de las personas; eso es lo que dice la normativa nacional», aseguró Quirós.