El Santo Padre Francisco nombró obispos auxiliares de la arquidiócesis de Buenos Aires a los presbíteros Sergio Iván Dornelles, asignándole la sede titular de Eguga; Pedro Bernardo Cannavó, asignándole la sede titular de Idassa; y Alejandro Daniel Pardo, asignándole la sede titular de Fissiana. Todos del clero porteño.
La información fue publicada esta mañana en forma simultánea en Buenos Aires y en Roma. Aquí, por ausencia del nuncio apostólico, lo hizo el encargado de negocios a.i., monseñor Daniele Liessi, a través de la agencia AICA.
El arzobispo de Buenos Aires es monseñor Jorge Ignacio García Cuerva, con cuyo gobierno pastoral colaborarán los nuevos obispos auxiliares.
La arquidiócesis porteña cuenta actualmente con otros cuatro obispos auxiliares: monseñor Gustavo Oscar Carrara, vicario general; monseñor Joaquín Mariano Sucunza, provicario general; monseñor Alejandro Giorgi; y monseñor Ernesto Giobando SJ.