La Cámara Federal de La Plata ratificó el rechazo a un planteo de la defensa de Darío Hugo Nieto, el ex secretario privado de Mauricio Macri durante su presidencia, para anular la extracción de información de su teléfono celular, en el marco de la causa por presunto espionaje ilegal durante el gobierno de Cambiemos.
Nieto sostiene que su teléfono fue manipulado después de ser secuestrado en el marco de la investigación, cuando la causa estaba a cargo del primer juez que intervino, Federico Villena.
El mensaje que desconoce es una comunicación con la ex número dos de la AFI, Silvia Majdalani, en el contexto de la investigación por espionaje ilegal que tramita por ahora en los tribunales federales de Lomas de Zamora.
A través de su abogado, Gervasio Caviglione, denunció una «violación a la integridad de la evidencia» porque «se le atribuye un ‘evento’ o ‘mensaje’ que no existió en la realidad y que es posterior al secuestro» del aparato.
Pero los jueces César Álvarez y Roberto Lemos Arias denegaron la posibilidad de recurrir en apelación ante la Cámara Federal de Casación, el principal tribunal penal del país.
«El Código Procesal Penal de la Nación instituyó un sistema completo y específico con relación a las decisiones que pueden ser objeto de los recursos de casación, esto es, vías por las que se puede acceder sólo respecto de las sentencias definitivas que con su dictado dirimen la controversia poniendo fin al pleito o haciendo imposible su continuación», explicaron los camaristas.
El reclamo por la supuesta vulneración del celular de Nieto, en ese contexto, «no ha logrado demostrar cuál fue el perjuicio concreto, de imposible o insuficiente reparación ulterior generado por la decisión cuestionada».
La Casación, desliza el fallo, sólo puede intervenir ante sentencias definitivas, y el reclamo del secretario de Nieto no apunta contra ello.
«La ausencia de sentencia definitiva no puede ser suplida por la invocación genérica de garantías constitucionales supuestamente vulneradas», dijeron los jueces.
El teléfono de Nieto fue revisado en dos oportunidades, uno por la Policía Federal y otro por la Gendarmería, ambos en junio de 2020, cuando la causa parecía encaminarse a una imputación directa contra el ex presidente Macri, cosa que nunca ocurrió.
Nieto denunció que en el análisis de su teléfono «no se han tomado los recaudos técnicos necesarios de protección contra escritura para preservar la evidencia».