La segunda ola de casos de coronavirus afecta duramente a la Ciudad de Buenos Aires, que en las últimas horas registró un nuevo récord de ocupación de camas de terapia intensiva, uno de los principales indicadores que se miran a la hora de tomar definiciones sobre eventuales restricciones.
La cantidad de camas de terapia intensiva ocupadas con pacientes con COVID-19 en grave estado es de 323 en el sistema público, lo que muestra un alarmante crecimiento en tan sólo 11 días: el pasado 10 de abril ese número era de 218. El total de camas disponibles en ese sector es de 450.
De esta manera, las autoridades porteñas vieron con alarma el índice, ya que superó el récord que se había registrado el 13 de agosto de 2020, cuando hubo 312 personas camas de UTI con cuadros graves de coronavirus.
El pasado martes el propio ministro de Salud de la Ciudad, Fernán Quirós, había reconocido el incremento en la ocupación del sistema sanitario porteño: «El promedio de la ocupación de camas en el sector privado es de 82 por ciento, pero hay terapias arriba del 95 por ciento».
Al brindar el reporte sobre la situación epidemiológica ante la segunda ola de casos de COVID-19, el funcionario porteño había explicado que la situación se daba debido a que la población elige a instituciones de renombre, que son las que se ocupan en primera instancia.
«En el sector público, está en el 65 por ciento. El esfuerzo es enorme», había agregado.
En tanto, según los últimos datos informados por la Ciudad, hay 725 pacientes internados leves, lo que da una ocupación del 48,3 por ciento de las 1.500 camas disponibles; y 496 leves, que ocupan el 9,9 por ciento de las 5 mil camas que hay en el sistema sanitario público. .
Además, el distrito contabiliza un acumulado de 314.481 casos positivos de residentes y 229.837 de no residentes.
La ocupación de camas de terapia intensiva es uno de los principales indicadores que analizan las autoridades sanitarias para evaluar la situación de los distritos y a la hora de tomar medidas restrictivas.