El presidente Alberto Fernández cuestionó este mediodía al gobierno anterior por no haber terminado las viviendas que comenzaron a construirse durante la gestión de Cristina Kirchner y manifestó que la única respuesta para no haber terminado esas casas «es el odio».
«Cada vez que vengo a estos barrios, muchas de estas casas quedaron prácticamente terminadas en diciembre de 2015. ¿Cómo es que no se terminaron? La única respuesta que le encuentro es el odio. Que alguien odie tanto que prefiera que las casas queden vacías a que alguien recuerde quién las hizo», sostuvo Fernández mientras encabezaba el acto de entrega de viviendas en el barrio Saladita, el Avellaneda.
El primer mandatario consideró, además, que «no hay nada más lindo que entregar viviendas porque la vivienda es un derecho humano».
«Hacer viviendas no es solamente darle un techo a cada uno, es darle condiciones de vida: un lugar donde los chicos puedan ir al colegio, los jóvenes puedan hacer deporte, donde todos tengan agua y cloacas», señaló.
En tanto, expresó: «¿A mí qué me importa si estas casas las terminó Cristina si yo lo único que quiero es que tengan casa? Eso debería importar a quien gobierna. Lo importante es resolver los problemas de la gente. La mejor democracia que podemos construir es la que continúa resolviendo los problemas de la gente más allá del tinte político que cada uno exponga».