El presidente Alberto Fernández cerró ayer otra de las ediciones del Consejo Económico y Social en el que se presentó la agenda productiva federal del Gobierno de cara a 2022 junto a dirigentes de su entorno y en plena crisis interna en el Frente de Todos.
Ante un auditorio colmado por representantes empresariales, sindicales y sociales, el mandatario hizo referencia a la problemática de la inflación que azota al país y pidió construir «una terapia de grupo» en el que prime el diálogo entre las partes para hacerle frente. Asimismo, culpó a la guerra «entre los poderosos» del número inflacionario de 2022.
«Tuve una primera charla con amigos de la UIA y la CGT y les planteaba miren, hemos probado mil formas, nos peleamos, discutimos, algunas veces nos bombardearon, por qué no nos sentamos en una mesa para contarnos qué nos pasa, hagamos una especie de terapia de grupo y encontremos una solución dialogada».
Entonces, el jefe de Estado citó a unos de sus beatles predilectos, John Lennon, y afirmó: «Como Lennon, que le pedía al mundo que le dé una oportunidad a la paz: argentinos démonos la oportunidad una vez al diálogo, para ver si podemos construir algo nuevo y distinto».
A la vez, explicó que en diálogo con el ministro de Economía Martín Guzmán realizaron un autocrítica y coincidieron en que de los 50 puntos de inflación, 10 tenía que ver con la guerra entre Ucrania y Rusia, pero «hay 40 que son nuestros».
«Eso está mal, nos daña a todos», admitió Fernández.
Durante su discurso en el Centro Cultura Kirchner (CCK) el mandatario pidió «un cambio» de régimen que posibilite avanzar en acortar las rechas de la desigualdad social, garantice la igualdad de género y atienda las problemáticas del cambio climático que impactan en la Argentina.
«Venimos de hacer dos años planteándonos que el mundo no es un lugar justo. Debimos atravesar un tiempo en el que la desigualdad y la injusticia quedaron reveladas ante nosotros. El virus (del Coronavirus) atacó a todas las economías del mismo modo», aseguró Fernández de cara un auditorio colmado.
Por su parte, el jefe de Estado respaldó el acuerdo alcanzado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y reiteró que implicará ajustes ni retracción de la economía.
«Vamos en el camino correcto. En materia económica ya tenemos un modelo que hemos sometido al Congreso y que no ocultamos. No esperen de nosotros ni ajustes ni retracción de la economía, esperen que sigamos creyendo y creciendo con criterios de igualdad», declaró con firmeza y continuó: «Logramos que la producción crezca pero no logramos que la distribución sea más justa, y en mayor medida es porque la inflación mete la cola».
Durante el encuentro del Consejo Económico y Social presidido por el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz, y expuso también el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, quien presentó los ejes para la implementación del Plan Argentina Productiva 2030.
El proyecto se basará en la conformación de mesas multisectoriales a lo largo del país, que tendrá como misión que nueve millones de argentinos puedan salir de la pobreza, y que además, se generen más de dos millones de puestos de trabajo asalariados.
Con un fuerte eje federal, se apuntará a que el 70% de los nuevos empleos se creen por fuera del AMBA y con cupo de género.
En la mesa, junto al Presidente, el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa aseguró que «la mejor foto de la Argentina» es la que refleja la unión de los participantes.
«Todos quienes estamos acá y quienes no están tenemos la obligación de la construcción de la Argentina de mañana, que convive en cada uno de nosotros, que vamos a salir, que podemos, que sabemos cómo construir ese país del futuro que muchas veces fracasa porque la pelea, la división, nos transforma en amigos y enemigos sin escuchar las razones y superar la idea del amigo- enemigo, dividida», manifestó Massa.
A su turno, Beliz habló de «amistad social» y parafraseó a Leopoldo Marechal, en una frase que aún retumba en los oídos de quienes protagonizan la crisis que atraviesa al Frente de Todos.
«El pensamiento único, es el grieto de guerra de minorías intensas, pero nunca será la bandera de victoria de mayorías transformadoras», repitió dos veces el secretario de Asuntos Estratégicos, mientras el Presidente asentía.
En el auditorio, estuvieron presentes el jefe de Gabinete, Juan Manzur; los ministro del Interior, Eduardo «Wado» de Pedro; de Salud, Carla Vizzotti; de Transporte, Alexis Guerrera; de Justicia, Martín Soria; de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus; de Desarrollo Social, Juan Zabaleta; de Cultura, Tristán Bauer. Así también los secretario de Relaciones Parlamentarias y el referente del Movimiento Evita, Fernando «Chino» Navarro y de Comercio Interior, Roberto Feletti.
También concurrió la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras y los gobernadores Gildo Insfrán (Formosa) y Ricardo Quintela (La Rioja); los consejeros Marcelo Fernández, Hugo Yasky, Gerardo Martínez y Héctor Daer; y las consejeras Delfina Veiravé, Marita Carballos, Paula Bibini y Edith Encinas.
Además, asistieron los dirigentes sindicales, Julio Piumato, Abel Furlán, Rodolfo Daer y el titular del Bloque del Frente de Todos en Diputados, Germán Martínez, y por el sector empresario, El titular de la UIA, Daniel Funes de Rioja, entre otros.